Terapia con Células Madre Mesenquimales en Artrosis Degenerativa

Si ha descubierto que la terapia con células madre este post podría ayudarlo: ¡aprender todo lo que pueda sobre el proceso de regeneración del cartílago articular es una gran idea!

La terapia con células madre es una técnica médica nueva y emocionante con una gran cantidad de posibilidades principalmente en el campo de la Medicina del Deporte y la Ortopedia. Aunque los detalles dependen en gran medida de los detalles de su caso, es probable que surjan las siguientes inquietudes sobre el cuidado posterior después de recibir el tratamiento regenerativo:Inmediatamente después del tratamiento: Su principal prioridad es obedecer todas las restricciones posoperatorias establecidas por su médico.

En general, debe mantenerse alejado de los medicamentos antiinflamatorios, descansar el área afectada durante uno o dos días y prepararse para comenzar la fisioterapia una vez que su médico le diga que está listo para ello. El dolor en varios niveles es absolutamente normal en los primeros 7 días después del tratamiento con células madre. Esto debería convertirse en un problema menor a medida que pasa el tiempo.

Las dos primeras semanas: Es muy probable que vea una inflamación significativa en el área tratada. Este es un efecto secundario normal del aumento de la actividad del sistema inmunitario. Los glóbulos blancos y otras sustancias regeneradoras críticas comienzan a acumularse en el área tratada. Esta es una cuestión estándar que prepara la bomba para que las células madre comiencen a funcionar. Después de que haya pasado el período de descanso recomendado por su médico, el área tratada puede estar lista para soportar el movimiento diario ligero. Presta atención a lo que te dice tu cuerpo y no fuerces nada que se sienta incómodo o doloroso. Es una buena idea limitar la cantidad de viajes que realiza en las escaleras y no levantar más de lo necesario durante este período. (Estas precauciones son especialmente importantes si recibió tratamiento en cualquiera de sus articulaciones: caderas, rodillas, hombros, etc.) Esforzarse para caminar un poco puede ayudar a aliviar el dolor, especialmente en casos de columna vertebral. La mejor forma de tratar los espasmos o dolores musculares en este periodo es con calor. La inflamación debe tratarse con hielo. Ejercite la moderación con sus tratamientos térmicos, especialmente si tiene un umbral de dolor alto. ¡No querrás lastimarte accidentalmente ni un poco!

Los medicamentos antiinflamatorios en su gran mayoría dañan la función de las células madre. Esto significa que querrá evitar el uso de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos durante este período. Esto incluye aspirina, ibuprofeno y naproxeno. Esté atento a los remedios naturales y se deben evitar los suplementos que puedan tener un efecto antiinflamatorio. Los ejemplos incluyen árnica y cúrcuma. Puede encontrar la cinta de kinesiología y otras herramientas terapéuticas útiles para el control del dolor en las primeras semanas después de su tratamiento. Hable con su médico con antelación sobre las ayudas más adecuadas para usted.

La Tercera y Cuarta Semanas: En este punto, su médico probablemente le recomendará comenzar un régimen de ejercicios sin impacto diseñado para mejorar su rango de movimiento. Las actividades de muestra incluyen caminatas suaves, trotar en la piscina o usar una máquina elíptica. Se debe enfatizar la importancia de mantener esta actividad suave. Las células madre de su cuerpo necesitan tiempo para convertirse en células especializadas. No desea impedir este proceso presionándose demasiado y demasiado rápido.

Las semanas quinta y sexta: Una vez que haya llegado a esta etapa, puede sentirse listo para una fisioterapia más ambiciosa. ¡No sobreestimes tus capacidades! Este es el momento de comenzar a agregar una resistencia muy ligera a sus entrenamientos, no de lanzarse a rutinas nuevas y arduas. En este punto, sus células madre han comenzado a construir tejido nuevo. El aumento del flujo sanguíneo provocado por el ejercicio de bajo impacto es útil, pero las células no necesitan un exceso de estrés. Este podría ser el momento adecuado para extender su rutina de terapia e incluir actividades moderadas de estiramiento (como Pilates o yoga).No agregue ningún ejercicio que cause compresión, como sentadillas, levantamiento de piernas, levantamiento de pantorrillas, giros, etc.

Las semanas séptima y octava: En este punto, puede comenzar a hacer ejercicios aeróbicos de manera segura sin poner en riesgo sus células madre. Continúe prestando especial atención al área de tratamiento y interrumpa su entrenamiento si siente algún dolor. El calor y el hielo siguen siendo los mejores para tratar el dolor y la inflamación en esta etapa.

Después del tercer mes: Las células madre introducidas en su cuerpo serán más potentes entre el tercer y el sexto mes después del tratamiento. Siga apoyando su trabajo protegiéndolos del estrés indebido. Puede hacer ejercicio para fortalecer sus articulaciones, pero no se esfuerce demasiado en el gimnasio ni se esfuerce demasiado en casa. La comunicación es siempre vital.

La terapia con células madre es tan nueva que es casi seguro que será una primera experiencia para casi todos los pacientes. Tanto el proceso de tratamiento como el de recuperación son significativamente diferentes a los de la cirugía ordinaria. No dude en hacer muchas preguntas antes y después del tratamiento.

Si tiene un fisioterapeuta que lo está ayudando, tómese el tiempo para verificar que comprendan los protocolos postoperatorios adecuados para la terapia con células madre. Esto es importante porque muchos de los ejercicios articulares en el juego de herramientas del fisioterapeuta son menos útiles o incluso perjudiciales. Si ha descubierto que la terapia con células madre podría ayudarlo, ¡aprender todo lo que pueda sobre el proceso es una gran idea!

La terapia con células madre es una técnica médica nueva y emocionante con una gran cantidad de posibilidades.

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